Abiel a sacado un nuevo libro para ayudar a los jugadores a sobre llevar su relacion con sus parejas. en el encontraran siertos puntos que pueden servirle a tener una mejor convivencia con su novia e aqui una pequeña muestra de su contenido.
"Siempre he intentado compensar familia y juego, y sé que muchos se encontraran en la misma situación. Para los jugadores habituales, el estilo de vida que conlleva el poker puede llegar a ser un verdadero desafío. He aquí una pequeña guía para compaginarlo. He incluido cinco puntos, tanto para el jugador como para su pareja.
para leer estos puntos da click en LEER MAS!
1. No “castigues” a tu pareja con malas jugadas o tu mala suerte. Deja tus pensamientos sobre poker en cuanto abandones la mesa. Si no puedes expulsar la mala energía rápidamente, di a la otra persona que necesitas unos momentos para relajarte. Descargar tu frustración no es bueno para nadie.
"Siempre he intentado compensar familia y juego, y sé que muchos se encontraran en la misma situación. Para los jugadores habituales, el estilo de vida que conlleva el poker puede llegar a ser un verdadero desafío. He aquí una pequeña guía para compaginarlo. He incluido cinco puntos, tanto para el jugador como para su pareja.
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1. No “castigues” a tu pareja con malas jugadas o tu mala suerte. Deja tus pensamientos sobre poker en cuanto abandones la mesa. Si no puedes expulsar la mala energía rápidamente, di a la otra persona que necesitas unos momentos para relajarte. Descargar tu frustración no es bueno para nadie.
2. No mientas sobre ganancias o pérdidas. Recuerda, eres increíblemente afortunado de encontrar a alguien que respalde tus sueños. Si el dinero en juego pone nerviosa a tu pareja, sentados y discutir un plan consensuado. Hablad honestamente sobre ventajas e inconvenientes del poker. Nunca te plantees ser profesional hasta que tengas dinero para pagar, al menos, todas las facturas durante el próximo medio año.
3. Si haces algún plan conjunto con la otra persona, no juegues ese día. Si estás en racha o un jugador muy malo se sienta contigo, no vas a querer abandonar la mesa, y puedes herir sus sentimientos. Créeme.
4. Si viajas para jugar, procura ser atento y responde al teléfono. Es duro para tu pareja si no estás, así que no hay necesidad de preocuparla innecesariamente sobre qué haces o con quién estás.
5. Recuerda, hay vida más allá del poker. Si puedes recordar una mano que jugaste hace cinco años, no tienes que tener muchos problemas para recordar el cumpleaños de la otra persona. o aniversarios lokiyo aja.
Consejos para la pareja del jugador
1. Si tu futuro campeón entra por la puerta con aspecto abatido (desgarrado) , no le preguntes si ha ganado. Relájate y dale algo de espacio. Necesita analizar lo sucedido y repasar algunas manos. Lo último que quiere es decepcionarte hablando sobre una gran pérdida de dinero.
2. Los jugadores de poker no cambian. Si no intentas entender la fascinación de este juego, tu relación va a pasar malos momentos. Andy Bloch, por ejemplo, tiene una novia increíblemente comprensiva (pronto será su mujer). Es inteligente y ambiciosa. Una vez que empezó a quedar con él, comprendió que para que funcionara tendría que adaptarse a sus viajes y horarios, así que hizo una web llamada PokerWire. Durante un tiempo viajó a todas partes con Andy, registrando fichas y entrevistando a jugadores. Ahora ha vuelto a estudiar y Andy se ha trasladado con ella, respaldando su decisión.
3. No te precipites para pensar lo peor. Si tu pareja no llega a casa antes de las cinco de la madrugada, puedes apostar a que está inmerso en el juego o que algún mal jugador dispuesto a repartir sus fichas entró (lokiyo llego bien pedo a media noche) justo en el momento en el que ellos se iban. La mayoría de los jugadores son honestos. Pueden farolear a un oponente, pero no lo hacen en la vida real (somos algo raros en ese sentido). Así que, a no ser que tengas una buena razón para pensar mal, concédeles el beneficio de la duda.
4. Un jugador no puede elegir el día o la hora en la que un mal jugador se sienta a la mesa. Algunas veces tendrán que jugar en Navidad o en tu cumpleaños. Si nos llaman diciendo que “Trizy” está en la ciudad, nada nos detendrá, excepto quizá una avería en el coche por ir demasiado deprisa a jugar con él.
5. Si quieres aprender a jugar, tu pareja quizá no sea el mejor maestro. Tendrá menos paciencia contigo que cualquier otro. Consigue algunos libros y comienza con ellos. Es duro enseñar a alguien que no ha jugado nunca, y puede ser frustrante para ambos. Juega en Internet en límites pequeños para practicar lo que vayas aprendiendo.
Espero que este artículo os haya divertido y servido de algo, y recuerda que las “desgarradas” o “bad beats” no son la mejor conversación de cama.